Así somos

https://residenciapinofiel.blogspot.com/p/video.html

martes, 30 de julio de 2013

¿Te cuidas para poder cuidar mejor?

Si estás cuidando a una persona dependiente, ya sea como familiar o como profesional, conoces las múltiples tareas que llevas a cabo cada día, desde la ayuda para la higiene personal del mayor al que cuidas, hasta resolver situaciones difíciles derivadas del cuidado y acompañamiento (por ejemplo, cuando vagabundea sin rumbo o cuando está triste).
Cuidar a una persona mayor dependiente es muy exigente y puede perjudicar al cuidador/a, tanto física como psicológicamente. Veamos algunas señales de alerta que pueden ser indicadores de que TÚ también necesitas cuidarte:

·         Problemas de sueño (despertar de madrugada, dificultad para conciliar el sueño,
demasiado sueño, etc.)
·         Pérdida de energía, fatiga crónica, sensación de cansancio continuo…
·         Aislamiento.
·         Consumo excesivo de bebidas con cafeína, alcohol o tabaco. Consumo excesivo de pastillas para dormir u otros medicamentos.
·         Problemas físicos: palpitaciones, temblor de manos, molestias digestivas.
·         Problemas de memoria y dificultad para concentrarse.
·         Menor interés por actividades y personas que anteriormente eran objeto de interés.
·         Aumento o disminución del apetito.
·         Actos rutinarios repetitivos como, por ejemplo, limpiar continuamente.
·         Enfadarse fácilmente.
·         Dar demasiada importancia a pequeños detalles.
·         Cambios frecuentes de humor o de estado de ánimo.
·         Propensión a sufrir accidentes.
·         Dificultad para superar sentimientos de depresión o nerviosismo.
·         No admitir la existencia de síntomas físicos o psicológicos o justificarlos mediante otras causas ajenas al cuidado.
·         Tratar a otras personas del grupo familiar de forma menos considerada que habitualmente.
·         Hiperimplicación, no saber ‘cortar’.
·         Fuerte sentimiento de impotencia y desmotivación.
·         Agotamiento físico y emocional.     
·         Conflictos familiares en relación con la actitud y comportamiento de otros miembros de la familia referidos por ejemplo, a la forma en que se cuida al mayor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario